Granito de arena
Hoy, 27 de marzo, me he sentado a escribir estas breves líneas sobre lo que estamos viviendo a lo largo de estas ultimas semanas y que, desde mi punto de vista, debe servirnos a todos para reflexionar sobre la vida y sobre lo que somos…
Hace tan solo unas semanas todo parecía controlado, la vida era un torrente de actividades, relaciones y consumo. Todos parecíamos tremendamente felices y, sin embargo, no era así porque nadie era capaz de valorar lo que tenemos y lo que realmente importa. En estos momentos de reflexión es cuando realmente te planteas la felicidad, y es cuando te das cuenta de la fuerza de la naturaleza que ha sido capaz de poner el mundo “patas arriba” en unas pocas semanas. No somos nada, señores…. Un granito de arena en el desierto, así es….
Pero un granito de arena también tiene su sentido en el desierto, y debemos entender nuestro papel en él. Debemos fluir con la naturaleza, no luchar contra ella. Seamos respetuosos con ella, solidarios con los demás y eliminemos nuestros egos que nos destruyen y nos conducen a una sociedad basada en el materialismo y el consumo. Demos importancia al tiempo, disfrutemos de la vida como lo hacen las plantas, año tras año, esas plantas que un año más están a punto de brotar y dar lo mejor de sí mismas, con ilusión, pero con respeto y humildad.
Son momentos duros que nos están costando a todos, pero reflexionemos un poco y salgamos fortalecidos de esta crisis con ilusión y con la intención de fluir con la naturaleza y de aprender de ella.
Ánimo y energía para todos.
José B. Jiménez-Landi